Grafitos de la Roma antigua: divertidos y vulgares a la vez




En la Roma antigua, abundan los grafitos callejeros. Contienen muchas frases vulgares y nos enseñan acerca de la mentalidad de los jóvenes romanos. Veamos algunos.


Grafitos del latín vulgar, Pompeia

   «Myrtis bene felas».
Mirtis, haces buenas mamadas.

    «Pecunia non olet».
La guita no huele.

«Lucius pinxit».
Lucio lo pintó.

«Lucrum gaudium».
El lucro es la felicidad.

«Cacator cave malum, aut si contempseris, habeas Iovem iratum».
Cuidado cagador, porque si desprecias [esta advertencia], contarás con un Jove irado.

«Luci Istacidi, at quem non ceno, barbarus ille mihi est».
Lucio Istácido, con quien no ceno; él me es un turro.

 «Suspirium puellarum Celadus thraex». 
El suspiro de las chicas: Celado el cuero.



«Cacator sic valeas ut tu hoc locum trasea». 
Cagador, que te salga bien para que puedas salir de este lugar.


«Epaphra, glaber est».
Epafra, eres un pelado.


«Apollinaris, medicus Titi Imperatoris, hic cacavit bene».
Apolinar, médico al emperador Tito, cagó bien acá. 

«Admiror, O paries, te non cecidisse, qui tot scriptorium taedia sustineas».

Me asombro, o pared, que no te hayas derrumbado, con todos los tópicos escritos que sostienes. 



«Hectice pupe, vale Mercator tibi dicit».
Héctor mi amor, el mercader te dice hola.



«Seni supino colei culum tegunt».
[Cuando] un viejo está de boca arriba; sus bolas cubren su culo.


«Felix hic locus est».
Bendecido es este lugar.


«Valeas qui bene futues».
Que ande bien el que coja bien.

Mo Ghile Mear, un poema bárdico de Seán Clárach Mac Domhnaill (1691-1754)

  Este poema es un buen ejemplo de la poesía bárdica popular del siglo VII. Se trata de un lamento [ caoineadh en irlandés, y se pronuncia...